Constatamos que en todo el mundo, la realidad de las mujeres en el lugar de trabajo y en la sociedad es preocupante. Las mujeres jóvenes están en su mayoría en el lugar de trabajo, por ejemplo las obreras de fábrica, las empleadas de hogar, las trabajadoras migrantes, las trabajadoras informales, las trabajadoras de centros comerciales, las trabajadoras del sector de los servicios y otros.
“Postulé para muchos empleos en diferentes fábricas, pero en vano. Finalmente decidí trabajar como trabajadora doméstica para una sociedad de viviendas. Es más fácil encontrar un empleo como trabajadora doméstica que un empleo en una fábrica. Pero el trabajo doméstico no está bien pagado» - Pakistán
Las mujeres son las víctimas del mundo del trabajo y de los bajos salarios. Son víctimas de la discriminación en relación con sus homólogos masculinos en términos de salarios y de beneficios sociales. No han escapado a la ola de flexibilización del trabajo con el sistema de contratos, el pago a la pieza, por cuota, al día y otros. La explotación del tiempo de trabajo de las mujeres se ha convertido en una realidad inmutable en el lugar de trabajo.